Ha llegado el verano, el calorcito, las cervecitas a la fresca, las risas en las terrazas, los días largos, las noches eternas, los amores y las verbenas ... ha llegado el verano a La Demba y este año hemos decidido celebrar las Dembacaciones con vosotros, os invitamos a todos a Dembear con nosotros, para dembear tan solo se tienen que tener ganas; ganas de disfrutar, de reír, de comer bien, de sentirse querido y sobre todo desplazarse ... porque eso es lo que se hace en verano, viajar, por eso os invitamos a Dembear que no es otra cosa que el arte de viajar, porque viajar se puede hacer de muchas formas, pero viajar con arte tan solo lo hacen aquellos afortunados que ponen en sus maletas grandes dosis de alegría, un poquito de buen gusto en el bolsillo lateral y muchas pastillas de originalidad en el neceser.
Ya tenemos a nuestra Demba vestidita de verano, se ha puesto un vestido fresquito al que le faltan trozos, porque para acabarlo necesita de vuestras puntadas, como es su primer verano nos ha pedido indicaciones de todo tipo para decidir como serán sus dembacaciones ...
Al principio estaba un poquito desorienta, pero gracias a toda la información que le hemos ido dando parece ser que ha recuperado el norte, y el sur seguro que también.
El equipaje de nuestra Demba para sus Dembacaciones es la mar de curioso, como ha vivido tantos y tantos años pero nunca había salido de su pequeño pueblo resulta que no está muy a la moda a la hora de escoger sus maletas, o sus baúles podríamos decir sin equivocarnos, por eso en cuantito la hemos dejado sola ha desempolvado los recuerdos que siempre la acompañan y preparado su hatillo y su documentación.
Van a ser unas Dembacaciones fantásticas, suerte que el maletero de nuestro coche, el nuevo, el que tan solo tiene 250.000 kilómetros, es amplio y fuerte, porque nuestra Demba es un pelín exagerada a la hora de prepararse para dembear.
Le gustaría mucho conocer el mundo, a cachitos pequeños para no atragantarse de tantas emociones, pero en eso tampoco sabe mucho por donde empezar, así que le hemos plantado un mapa y hablado un poquito de lugares en los que hemos estado.
Le gustaría ir a todos lados, pero le hemos aconsejado que se lo tome con calma, con mucha calma, porque no es muy habitual que una casa marche de vacaciones y aunque ella lo que desea es dembear muy probablemente acabará haciéndolo entre sus cuatro paredes de siempre, o mejor dicho, entre sus cuatro paredes nuevecitas y acompañada de todos aquellos que decidan venir a dembear en ella.
Pero no por eso ha de deshacer el equipaje ni olvidar recorrer el mundo junto a los que la visitan, nuestra Demba está ahora más preparada que nunca para recibiros y daros las mejores dembacaciones que se os ocurran ... ha mirado planos, mapas, rutas, lugares varios y se está engalanando para pasar un verano cargadito de aventuras en vuestra compañía
Y como al fin hemos logrado mentalizarla de que realmente ella lo que se dice viajar muy probablemente no pueda hacerlo, le ha dado la vuelta a la tortilla y ha decidido que dembear se puede hacer de muchas formas, por ejemplo recuperando antiguas costumbres que por modernos, por gandules o porque sí hemos ido perdiendo ... este verano le gustaría recuperar la costumbre de recibir postales, hubo días pasados en los que nuestra casa recibía muchas postales, del mundo o del pequeño mundo de esos que se acordaban de ella, por eso os las pide, postales de donde sean, no importa que no estéis de vacaciones, no importa si la escribís en el sofá de casa, porque todos los sitios son especiales si se saben mirar con las gafas de ver bonito.
Ya ha recibido sus primeras postales, la primerita de todas se la envío Jota desde muy cerquita, y le tiene un cariño especial, como no podía ser de otra forma.
Poco a poco le han ido llegando otras muchas que forman parte de la decoración de nuestro comedor en nuestras dembacaciones y para alegrar la vida de todos los que pasamos nuestros días dembeando en la Demba.
Y cuando se acabe el verano vamos a sortear entre todas las postales que la Demba haya recibido un fin de semana en su compañía, para dembear también en octubre, en noviembre y en diciembre o cuando pueda ser, porque en cualquier momento apetece aplicar el arte de viajar en la vida de uno, cualquier excusa es buena para conocer otros lugares y, si que vengáis a dembear estos días en nuestra compañía nos alegra, el que nos enviéis una postal va a poner de un humor fantástico a nuestra anfitriona, y a todos nos gusta que esté la mar de contenta.
HOTEL RESTAURANTE LA DEMBA
C/ Afueras s/n
22392 Abizanda (Huesca)
España
FELICES DEMBACACIONES A TODOS !!!!
J. precioso tu blog, me gusta todo: la lectura, las fotografías, en fin TODOOOOOOO.
ResponderEliminarUn beso enorme.
María Luisa
Gracias María Luisa,
EliminarDesde La Demba un fuerte abrazo y esperamos recibir una postal de tus vacaciones ... Besos
Jota